Tus justas palabras.
Y los horriblemente hermosos lunares de tu cuello.
Odio tu excitante espalda.
La odio con todo mi alma.
Odio no poder evitar tus ojos.
Y ceder ante todo por ellos.
Por Dios, como te odio.
Sos tan dulcemente insoportable.
Te odio infinitamente,
Tanto que hasta incluso creo que...
[No lo voy a decir]
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