miércoles, junio 11, 2008

Recuerdo.

Yo dije que no quería que me hablaran de vos.
Yo dije que escuchar tu nombre (aunque sea en la distancia) no me hacía bien.
Yo dije, re dije y repetí.
Pero tuvieron razón sus palabras, me hace mal pero me interesa, no lo quiero escuchar pero quiero saber de vos.

Yo advertí que no te había superado cuando me empezó a temblar la voz.
Y lo confirme cuando se me escaparan dos lágrimas (apenas dos del ojo izquierdo) que me bastaron para devolverle a mi boca el salado sabor de tu recuerdo.

Yo me reiteré una vez más que debería odiarte, que debería ser yo tu enemiga principal, pero decime vos, decime, como hago para aborrecerte, si te he amado como a nadie (o casi nadie) alguna vez.

Y no se si aún… no se.

Maldito seas, que ni con todo el dolor, toda la bronca y todas las razones, conseguís ser vos el peor invierno de mi vida.

María Sofía Borsini

miércoles, mayo 28, 2008

#16

Daría lo que fuera por abrazarte esta noche.
Sobre todo porque adonde veo los cuerpos van enlazados de a dos
Y me di cuenta que cuando hace frío te extraño mas.

Mará Sofía Borsini

lunes, abril 28, 2008

PSIQUE -hablando a una pared- [capitulo doce]

12. Libertad.

-Crees que alguna vez seremos libres?
Somos libres. (Ya conocerán ustedes mi concepto de libertad)
-Estoy hablando en serio, de verdadera magia, de autentica libertad.
No se porque motivo siempre que ella hablaba de libertad yo sentía miedo, miedo por ella, por nosotros o por sus extrañas reacciones.

-Supongo que serás libre cuando salgas de acá-le dije.
Y me parece que no le gustó nada que le haya dicho eso.
Aparte dos segundo mi cabeza para pensar, que quizás nunca salgamos de acá, ni ella ni yo, y luego aprecié que ella ya había notado eso, y lo había hecho mucho tiempo antes.

Creo que metí la pata otra vez, eso es algo que nunca debería haber dicho.
Sólo existían dos cosas que jamás debía hacer: gritarle y hablar de imposibles (es decir, de cosas realmente imposibles, como la posibilidad de que alguna vez en esta vida volvamos a ser físicamente libres)

Note también que se angustió mucho al recordar que no saldríamos, y que por ende, jamás gozaríamos de lo que para mí es esa falsa libertad, pero que para ella parecía ser mucho más que eso.

Ya van dos y no se cuantas me restan,
Pero involuntariamente estoy contribuyendo a su inevitable destrucción.

Es increíble como el amor puede desestabilizar al más estabilizado de los seres.
(O al más igualmente desestabilizado en este caso)


María Sofía Borsini

lunes, abril 21, 2008

PSIQUE -hablando a una pared- [capitulo once]

11. Ella.

Hubiera detenido el tiempo…
En el instante preciso, perfecto, mágico, divino e inolvidable en el que la vi llorar.

Se que ella no quería que la viera, pero la vi igual.
Vi como los ojos se le llenaron de lágrimas cuando le pedí que me hable de ella.

No se quien habrá sido ella antes de ser un ángel.
No se quien habrá sido ella antes de ser ella.
Antes de encontrarse con esa paz celestial que la describe tan bien.

No se quien habrá sido, y no me la imagino de otra forma.

No se si estuvo enamorada, no se si tenia amigos.
No se si hablaba mucho o poco.
No se que le gustaba comer cuando salía por ahí.

No se como se llevaba con sus padres.
Y no se si le dolerá no verlos.
Porque por alguna extraña razón, aquí nadie la visita.

No es que ese sea un dato importante, no.
A mi tampoco vienen a verme y no es la gran cosa.

Se puede vivir igual, al menos yo puedo hacerlo.
Pero no se si ella podrá.
No se si ella no sufre en lo más profundo.
No se si ella llorara por dentro siempre y sólo a veces su interior se inunda haciendo que se le escapen esos cristales de sal cuando mira hacia el costado,
O hacia abajo.

Y que cuando chocan con la luz de su mirada forman el arco iris más hermoso que jamás he visto..

Debe ser que muy de vez en cuando amanece frágil.
Pero yo creo, y rectifico con mis propias conclusiones,
Que ella es frágil siempre.
Pero se esconde.
Se esconde detrás de un vidrio polarizado, y se quiere mostrar fuerte.
No se porqué ni para qué.
Porque yo podría cuidarla,
Y no habría necesidad de que mintiera tanto.
No habría necesidad de que se mintiera a si misma.

No se porque están dudando de eso tampoco.
Ya les dije, muchísimas veces les dije, que estoy loco, pero eso no me impide ser humano.

Y por qué no podría cuidarla?
Por qué no podría curar sus heridas?
Arreglarle sus alas para que vuele de nuevo?
Quien podría oponerse?
Que obstáculos habría?

Todo lo que necesitamos es amor.
Y yo la amo.
Pero no puedo decírselo,
Porque es muy peligroso.


María Sofía Borsini

PSIQUE -hablando a una pared- [capitulo diez]

10. Sus Palabras.

-No hables, me dijo
Quédate así, en silencio.
Las palabras solo arruinan las cosas.
Todo es perfecto cuando existe el silencio.
Es casi como el placer de la muerte.
Todo es perfecto cuando uno se esta callado.
Cuando uno esta muerto.

Pronto descubrí de donde provenía ese escalofrío que a veces recorría mi cuerpo.
Ese miedo inexplicable.
Ese miedo sin razón.
Era miedo a ella.
A ella y a lo que pudiera hacer, solo para demostrar que era fuerte.
O débil.
O para demostrar algo, o para que la escuchen.
O para que sientan lastima.
O para que le den cariño.

Pronto descubrí también que yo podía ser el culpable de esos pensamientos.

Antes de ella, yo no tenia nada.
Antes de mi, ella estaba perdida.
Y ahora?
Y ahora no se como esta ella.
Pero yo soy feliz.
Porque ella me hizo feliz.

Empecé a preocuparme por su obsesión con la muerte.
Empecé a sentir terror.
Ya no era miedo, no.
Era mucho más grave.

Y cada vez que no la veía me carcomía la desesperación.
Y cada beso que le daba era retrasar lo inevitable.
Porque en este tiempo llegue a conocerla muy bien.
Y ella sabía lo que quería mucho antes de conocerme.
Y ella hacía lo que fuera por conseguir sus objetivos.
Solo estaba esperando el momento.
Su momento.

Porque sabía que habría uno, siempre lo supo.
Y siempre lo tuvo en mente,
Pero yo me negué a aceptarlo.

Me creí tan importante como para cambiar su existencia.
Como para darle un sentido a su vida.
Y descubrí que lo que pasara no sería culpa mía (aunque así lo sintiera yo por siglos)
Descubrí que ella ya se había decidido,
Y que yo nada podría hacer al respecto.

Solo restaba esperar.
Y sacarle el mayor color a ese ángel que tenia en mis manos.


María Sofía Borsini.

viernes, abril 18, 2008

El túnel.

Dos semanas sin vos
Es mucho
Es una eternidad
Es un túnel sin salida y sin final
Sin luz
Sin nada
Vacío
Completamente vacío
Y conmigo adentro
Y lo peor de todo, con vos afuera
Sin poder cruzarte y sin poder verte
Sin poder tocar tus manos
Besar tu piel o mirar tus ojos
Olvidándome la contextura de tu cara
Dibujándola, imaginándola
Y desdibujándola después
Escribiendo por todos lados una palabra que empieza con I
Borrándola después
Volviéndome fanática de tu risa y de tu voz
Volviéndome neuro-psicotica
Enloqueciendo de a poco
Y amándote igual

¿Cuántas horas faltan?
No se, vos me dirás.

Maria Sofia Borsini

Sin titulo 10.

Si no me amas y dices que me amas,
Me estarías engañando conmigo misma.
Si no me amas y me tienes contigo,
Si no me amas y me besas igual.
Si no me amas y me dices que me amas,
Te estaría engañando, en el fondo, a tí.
Si no me amas, las caricias,
Hasta raspan y lastiman.
Tienes dagas en las manos,
Y en la boca, mil mentiras.

María Sofía Borsini

Ausencia o no.

Yo no se que gano con echarme en la cama y abrazarme sola, ni con taparme porque tengo frío sin tus besos.
Yo no se que gano con recordarte en cada segundo si se que es imposible que vengas, si se que no vas a tocar el portero por arte de magia, resumiendo un viaje de hora y media solo a segundos porque tu radar se puso en rojo y te enteraste que “tu Polaroid te extraña”.
Y capaz que ni te enteraste.
Capaz que estas durmiendo o tirado en la cama o escuchando música o preparándote para ir a trabajar.
O capaz que estas tirado en la cama durmiendo mientras escuchas música y te haces a la idea de mala gana que ya te deberías estar preparando para ir a trabajar. Uy si, y que encima hoy te toca de mozo…
Yo tampoco se que gano con extrañarte tanto justo en este momento preciso si ya se que mañana dentro de poco voy a estar de nuevo envuelta en tus brazos y me voy a olvidar de toda esta agonía sin vos.
Y tampoco se porque te extraño de esta manera enfermiza, contagiosa y te diría que casi psicópata ahora, si total ya pasaron 5 días (sí, cinco días completos) de estar bien bien lejos de tu aire y bancarmela mejor que hoy, que te tengo más cerca.
Cuando le encontré una respuesta te aviso, te mando un mensaje.
Por ahora te digo que te amo y nada más.
Ah, y te quiero.
Y te extraño.
Y que estoy acá.

Maria Sofia Borsini

Dificil.

No es fácil estar sin vos más de 3 horas o a lo sumo 4.
No es fácil porque a partir del minuto 241 ya te extraño mucho mucho, diría que demasiado.
Y ya me empiezan a quemar los brazos de no sentirte dentro de ellos.
Y ya me duele la espalda, la cintura y hasta la piel por no tener tus caricias.
Podría decirte que hasta me arden los ojos de verte solo estático en las mismas fotos.
Que se me secan los labios y me quedo sin voz. (Y sin vos)
Que no se utilizar mis oídos sin escuchar un TE AMO proveniente de tu cuerda vocal.
Que te extraño una noche más y que, definitivamente, cada vez va a ser más difícil.

Maria Sofia Borsini.

Distancia.

Estas lejos y no te veo.
No te escucho.
No te siento.
Estas lejos.
Estas difuso.
Pero estas.
En algún lugar estas.
En algún rincón.
En algún ángulo.
Cerca de alguien.
Lejos mío.
Aunque no quieras,
Aunque no quiera.
Aunque me mienta
Diciendo que estas acá.
No estas y no estoy.
Ves mi cuerpo pero mi alma no.
Ya te dije, no estas y no estoy.

Maria Sofia Borsini – viernes, 18 de abril de 2008.

PSIQUE -hablando a una pared- [capitulo nueve]

9. Perdón.

La vi, en el rincón de siempre, asomada por la ventana como aquella primera vez.
Me acerque, como en aquel entonces, convenciendo a mi boca de que haga el intento de hablar.
La cual, por alguna extraña razón, se negaba a acatar mis órdenes.

Hubiera sido muy gracioso verme ahí parado junto a ella sin emitir sonido.
Hubiera sido hasta cómico observar cada cuantos segundos iniciaba una mueca que cerraba inmediatamente antes de pronunciar palabra.

Y cuando estaba en el punto justo,
Y cuando por fin iba a vencer mi orgullo…

-Perdón-me dijo.
Y otra vez consiguió dejarme callado.

No entendí porque debía yo de perdonarla, pero me fue más fácil.

-Te perdono- le respondí.

Y las cosas volvieron a ser lo de antes,
Afortunada o desafortunadamente.

Luego de eso, me acercaba su soledad todas las tardes.
Me sentaba en el pasillo largo y blanco, blanco como todo lo demás.
En ese pasillo donde siempre la encontraba, apoyada contra la pared, confundiéndose con tanta blancura.

Solo llegaba y me sentaba, teniendo la seguridad de que estaría conmigo.
Algunos días hablaba, otros se dedicaba a besarme, y a veces, solo estaba ahí.
Pero de todas formas me agradaba la compañía de su soledad.

María Sofía Borsini

jueves, abril 17, 2008

El día que aprendamos a amar.

Estaremos juntos el día que
La tierra truene,
Las paredes hablen,
El cielo deje de llorar,
El corazón deje de sentir,
Mis lágrimas se olviden de brotar,
Los poetas se cansen de escribir,
Los pintores se olviden de pintar,
Los artistas dejemos de sufrir,
Los de arriba dejen de mentir,
Los de abajo paremos de soñar,
Mi autoestima decida aparecer,
Los héroes dejen de morir,
Las hojas no caigan en otoño,
La bestia deje de brillar,
El humano se harte de fumar,
Las almas se atrevan a huir,
El condenado se crea de nuevo feliz,
Dejemos de tomar atajos,
No nos quede más crueldad,
Sobrevivamos a la realidad,
No nos valgamos de pretextos para volar,
Estaremos juntos el día que todo sea perfecto,
El día que tus ojos me pidan perdón,
El día que aprendamos a amar.

María Sofía Borsini.

Algo.

Ok, siempre me gustaste un poquito.
Pero no tanto como para decir “guau, como me gusta este pibe”.
Pero un poquito si, la verdad que tenes ese “algo” que me hizo mirar dos veces.
O tres.

María Sofía Borsini [y el eterno retorno a lo idéntico.]

Jamás pense que encontraria la felicidad en tus ojos.

Jamás pensé que encontraría la felicidad en tus ojos
En tus labios, en tu piel.
Siempre tan distante, nunca te creí tan loco
Contra todos los pronósticos sos el dueño de mi ser.

Jamás creí que me estremecería así al besarte
Que me quitarías el aire, que me harías tanto bien.
Siempre tan paralelo que nunca jamás te cruzaste
Ahora ya no existo si no te vuelvo a ver.

María Sofía Borsini.

Tranquilidad.

No me digas lo que dicen todos.
Si vas a ser uno más, entonces, no seas Nadie.
Necesito cambios bruscos.
Ya me harte de los mares calmos.
Estoy aborrecida de tranquilidad, Rebalsada de ella.
Se me escapa por los costados, se me sale por los orificios y rajaduras de la piel.
Se me se dispersa por los ojos, la boca y la nariz.
Me chorrea del pelo, de los brazos y de la punta de los dedos.
Se me resbala por las piernas y se me cae de los pies al caminar.
Tranquilidad no, por favor, ya tuve bastante.
Tranquilidad, no quiero, ya no me cabe más.

En mi vida no hay finales de capítulos.
Solo un archivamiento letal en la memoria, para seguir leyendo más tarde.


María Sofía Borsini.

Verano.

[A mi nona]

Te quiero escribir una carta con todas esas cosas que nunca te dije, no se si fue por orgullo o que, pero estoy segura que debe haber sido por alguna de esas cosas idiotas que alimentan el estúpido ego humano.
Y te pido perdón, por no haber estado ni en el último momento que pude estar y lo sabía. Y tampoco haber hecho nada por estar en el anteúltimo ni en el anterior.
Yo no se si las cosas de verdad habían cambiado o si las dos poseíamos un engreimiento superior a nosotras mismas, pero los tres años sin ti no los sentí como tales.
Pero ahora si. O no se, estoy intentando hacerme a la idea que vos sos la primera persona cercana a mi, con mi misma sangre que me allega a algo que creía conocer más de lo que conozco.
Te digo que ahora sí, creo, porque ahora no tengo tiempo para pasar por la casa vieja con olor a años para ver tele y hablar. Porque ahora no vas a estar esperando nada sentada en el umbral. Porque ahora veo muebles que se van y carteles de ventas que entran, cajas de cosas, bolsas de ropa que creo, nunca debes haber usado.
Y recuerdos que quieren entrar en mi vida y que yo no se si quiero dejar entrar.
Porque no quiero pensar, por las dudas que desde tan lejos, igual me hagas mal.
Hubo un tiempo que adoraba estar junto a vos, y eras mi abuela preferida. Y no se exactamente cuando dejaste de serlo.
Le echo la culpa a que crecí. Y que ya no tenía más tiempo para “eso”.
O quizás me daba vergüenza afrontar que aún hoy, “eso” me gustaba tanto.
Y ahora te quiero dejar estás palabras, para alimentar la ingenuidad de que de alguna manera me escuches.

Que te puedo decir, el verano me quito muchas cosas, un amor, dos amigos, tres desconocidos y dos indispensables.
Me quito cosas planificadas y cosas que no. Y me quito algunos “alguien” que ahora no me acuerdo ni como se llaman, ni como conocí, ni como fueron tan importantes en mi vida.
El verano me quito muchas cosas, y entre ellas a vos.
Si de algo sirve que te pida perdón ahora que, creo, no podes escucharme, lo hago.
Perdón por todo…y gracias.

María Sofía Borsini – 28 de enero del 2008.

Celos.

La miraba con ojos de casamiento, de aniversarios, de hijos, nietos y vejez juntos.
La miraba con ojos de compromiso.
Lo se, me di cuenta.
La miraba con esos ojos…
Con esos ojos hermosos.
Con esos ojos con los que nunca me miro a mi.
No, claro, porque a mi me miraba como pasatiempo y diversión, como buenos besos y buenas noches, como artista de cabaret, como “te amo pero no”, como “te mentí, sos mi amiga y nada más”.
Y claro que nada más.
Y anoche llamo para pedirme perdón, pero yo se, yo se…
Yo se que me seguís viendo así, por más que ya no me mires y que todo eso te haga sentir culpable.
Yo se lo que fui,
Tu prueba, tu practica, tu “vamos a ver que pasa”.
Tu rata de laboratorio, tu experimento fallido, tus ganas de pasarla bien pensando que pasaba algo más.
Y mis estúpidas esperanzas de que pasara algo más con el tiempo,
Antes que lo notaras, y me dijeras que no.

María Sofía Borsini.

miércoles, febrero 27, 2008

Cartas sin destino.

En todo este tiempo de estar sola y así tener tanto pero tanto tiempo para pensar logre aprender y crecer mucho.
Y en todos esos momentos en los que no te podía abrazar y tenia que caminar sola hasta llegar a algún lugar siempre se me ocurrían veinte mil cosas para decirte cuando lograra verte de nuevo,
Pero cuando al fin podía tenerte frente a mí, las palabras se borraban y no podía más que decirte un repetido “te extraño”, un tonto “te amo” (no es que amarte sea tonto, no quiero decir eso) es solo que es muy poco con todas las cosas que hubiera querido decirte realmente.
Y es por eso que te escribo esto, porque anoche tuve que caminar sola de nuevo para llegar a algún lugar y no me quedo otro remedio que pensar en vos y como sabía que después no iba a poder nada decirte todo lo que pensé, decidí empezar a escribirlo.
Así que esta va a ser la primera carta de muchas más que le seguirán, y muchas, muchísimas que deberían haber sido escritas antes…


María Sofía Borsini 2006 [Recuerdo Lejos, Quedate Ahí]

#15

Siempre en el mismo mundo
Y jamás en la misma sintonía.

María Sofía Borsini

Sin titulo 9.

Esta cama te extraña,
Le falta sentir el calor de tu espalda.
Esta cama te extraña,
No tiene tus besos, tus manos marcadas.
Esta cama te extraña,
No encuentra tus ojos en cada mañana.
Esta cama te extraña,
Esa almohada que tienes está cubierta de lagrimas.


María Sofía Borsini

Tu boca en la distancia.

Tu boca en la distancia,
Se desdibuja y cambia el tono de voz.
Muta en otras bocas, en otras cosas, en otros objetos,
Pero ninguna tan perfecta como la tuya.
Porque la tuya es tuya y la tuya sos vos.
Y tu boca en la distancia se vuelve un elixir inalcanzable,
Una propiedad divina.
Que solo podré tocar con mis labios luego de pagar el precio
De minutos y horas, horas y días, y quizás días y meses.
Pero espero que no meses y años.
Cuando pruebe tu boca de nuevo y recuerde su sabor preciado,
Sabré que no fue en vano el tiempo, lo kilómetros ni el daño.
Porque solo tu boca le devolverá a mi vida la vida,
Y el color, y el sabor que la distancia le estaba quitando.
Y solo tu boca tiene la cura, antídoto y veneno hacia todo,
Que me hace perseguir no en vano tu rostro.
Para poder acabar con ésta, mi primer semana sin tus besos,
Mi primer semana con tu ausencia no ausente.
Mi primer semana con tu presencia a pesar de todo,
Con tu boca en la distancia, pero ahí, siempre ahí.


María Sofía Borsini

Mi primer semana sin ti.

(Pero contigo, si lo pensas bien)

Voy a decirte algo que no me gustaría que se sepa (que ni vos ni nadie conociera) porque no quiero parecer débil aunque se que a veces lo soy y porque mi orgullo pesa más de lo que vos pensas. Pero… EXTRAÑO.
Y capaz que si vos no existías era distinto, estoy segura. Capaz que se hacia más leve (porque no es verso, la cosa que más extraño es tu presencia) aunque estés acá, al lado mío ahora mientras escribo y cuando voy y vengo y estoy y siempre.
Extraño, por ejemplo, escuchar tu risa, que me abraces, mi casa y aunque no lo creas, hasta extraño tus cosquillas.
Sabes? Paso varios minutos al día mirando por la ventana de mi pieza, visualizando momentos que pasamos juntos y me doy cuenta que fueron muchísimos en este corto tiempo, y que si vos querías recuperar el tiempo perdido, bueno, ganaste, porque lograste que mi amor se potencie por mil en cada segundo que corre.
Y si queres que me ponga cursi, te comento (y si no queres te lo voy a decir igual) que lo último y lo primero que hago en el día es mirar tu foto (la que esta pegada en la pared, bien al lado de mi cama) darle un beso y decirle a ese pedazo de papel cuanto te quiero, con la ingenua esperanza de que capaz me escuches.
Y aunque suene más estupido, irónico e infantil, todavía creo que si, que de alguna forma lo haces.


María Sofía Borsini

lunes, febrero 25, 2008

Primera independencia personal.

No puedo vivir sin:
El cargador del cel que me olvide en casa.
El cortaúñas (justo ahora se me vino a encarnar una)
Mi grabador y/o PC y/o DVD (o cualquier artefacto que reproduzca música, Puta Madre!)
Adaptadores, muchos adaptadores de tres patitas.
Y sin vos, claro.

Extraño que:
Hagan las cosas por mi de vez en cuando.
No convivir con gente que no conozco.
No tener que esforzarme por conocer a la gente con la que convivo.
No necesitar saberme los días que pasa el recolector de basura ni los horarios de los colectivos.
Que me cocinen.
No tener que pensar que voy a comer esta noche.
Tu sonrisa me ilumine la mañana (aunque tus mensajes ayudan igual)

#14

Todavía no me he ido y ya te empiezo a extrañar.
Es que eras mucho más que el aire,
Eras el agua de este mar.

Y estoy contando los segundos para volver a verte acá.
Porque no importa donde estemos,
Sos el dueño de mi eternidad.


María Sofía Borsini

#13

Habla y hazte pedazos.
Habla y rompete en mil.
Habla y ya no quedaran trizas,
Ni siquiera trizas de tí.

María Sofía Borsini

#12

Todo el mundo que necesitas esta aquí.
Entre tu espalda y el último milímetro de tu dedo anular, entre el ángulo perfecto que me queda para acomodarme dentro de tus brazos, mover un poquito la cabeza y besarte igual.


María Sofía Borsini

domingo, febrero 24, 2008

Amo.

Amo tu forma de respirar, de cómo te reís, de la manera en que hablas.
Amo… tu cuello, tu espalda, tus manos…como amo tus manos!

Amo la felicidad que me das, la sensación de que todo está bien.
La paz, las ganas de que todo esto no cambie nunca.

Amo aburrirme sin vos porque así consigo motivos para quererte cada segundo más.
Y amo extrañarte cuando no estas y no querer que te vayas nunca.

Amo tu nombre y la dulce combinación que hace en mis oídos.
Y te amo a vos también, porque sos absolutamente todo lo que siempre había querido.


María Sofía Borsini

[En pocas palabras y bastante simple: Te amo.]

sábado, febrero 16, 2008

Sin titulo 8.

Porque no te conocí antes, maldita sea?
Digo, conocerte bien, como ahora.
Porque antes te conocía, pero no.
Y tener los días contados y saber que después de ESE día no va a funcionar (o sí), ME DA BRONCA.
Mucha bronca.
Porque ahora significas más de lo que quiero que signifiques.
Y porque ahora se cuanto te voy a extrañar.


María Sofía Borsini

miércoles, febrero 06, 2008

2015.

Yo no creo en el amor a través de los años.
No, no me des esperanzas.
No me hagas pensar que esta vez lo de nada es para siempre
Puede ser un cuento.

Me hacen mal las ilusiones
Que se quiebran en el fondo de mí
Porque como cristales se rompen
Y como cristales cortan también.

En el 2015 estarás aquí?
No me mientas, no me digas que será así.
Porque sos humano,
Y como todo humano te cansaras de mí.

Serás tu el único? El final?
El definitivo? Quizá.
Hoy estás, mañana?
Saldrá el sol si me vuelves a llamar?

No me despiertes si te tienes que marchar.
Si te esperan en tu casa, anda.
Yo duermo mientras abrís la puerta y caminas.
Dame un beso, pero no me digas si volverás.

Si mañana te encuentro, no será igual.


María Sofía Borsini

martes, febrero 05, 2008

Polaroid está triste.

No, no soy yo la que le está poniendo un fin.
Sos vos, directa o indirectamente.
Y no me digas que no te entiendo,
Porque sabes que lo hago muy bien.
Y creo que entenderte tanto es lo que me hace mal.
Porque me hubiera gustado, ser para vos, lo que vos sos para mí.

No, no me digas que somos eternos.
Porque me estas demostrando que no es así.
Deja de mentirme! bajo cuantas pieles tenes tatuado mi nombre?
No jodas. No te creo.
No lo veo porque no está.

Se supone que sos mi hermano? mi amigo?
Si parece que ni siquiera me conocieras!
No sabes cuanto doles, no tenes idea.
Porque vos lo fuiste todo y yo soy solo letras.
Y ojala que separarme de todo me separe de vos aunque yo así no lo quiera.
Va a ser lo mejor, que seas cómodamente feliz.

Y si te encuentro entre los siglos y la distancia
Te invito a hablar, a recordarnos.
Y espero que bajo el paso del tiempo, sigas estando vos.
Mi ángel de la guarda.


[Hoy perdí a un amigo, el mejor.
Polaroid está triste.]

Clara.

Sentí un profundo deseo de hacerle el amor, de acariciar sus piernas, su pelo, tocar tácticamente su espalda y ver como se retorcía de placer, ver su boca entreabierta y sus ojos entrecerrados, esa mueca que en cualquier momento de la vida podría parecer graciosa pero en este momento me parecía hermosa.

Y traslade mi mano con cuidado por todo su contorno, como una pluma (un par de veces use una pluma para esto, pero hoy no, hoy eran solo dedos) y me encaba apreciar su piel bajo la mía y sentía casi como si el cuerpo me estorbara, como si deseara ser solo alma y abrazarla tan fuerte hasta eliminar huesos, carne y piel. Y ser solo un alma, un alma y nada más, que era todo lo que se necesitaba para ser feliz.

Tenía orgullo de que durmiera en mi cama, tenía orgullo de que fuera mía, ser solo yo el dueño de sus labios, que mi boca sea la única que conocieran sus besos, hermosos besos, dulces besos, perfectos besos, apasionados besos, cansados besos, cortos besos, largos besos, extraños besos, obligados besos, olvidados besos, besos, besos, besos. Besos de su autoría.

Y ella también sabía como hacerme volar alto, no se de que estaban hechas sus extremidades ni que droga inyectaba en mi ser cada vez que me tocaba, pero ella también sabía, si que sabía.

Al fin de cuentas opte por la inevitable situación de compenetrarme en ella como me fuera posible (si, ustedes ya saben de que manera me era posible) y viví el momento más preciado de toda mi vida, no les voy a decir cuanto tiempo duro, solo que para mi fue eterno, y lo será siempre.

Luego respiré profundo, la vi, la mire y después la observe y seguía siendo hermosa, creo que un poco más que antes, o eso ya se debía al enamoramiento estúpido que me estaba afectando.

Y finalmente, en el tiempo para el cual me debería haber marchado cometí el peor error que sabía no debía cometer.

-Clara?
-Sí?
-Te amo.

María Sofía Borsini – Martes, 05 de febrero de 2008.

Poema para no se quien.

(o quizá si sepa para quien, pero no lo quiero decir)

La más larga de todas las horas.
El más silencioso despertar inerte.
La más oscura de todas las medianoches.
El más estúpido pensamiento ajeno.
El reloj que sigue, y pasaron las doce y treinta.

La más esperada de todas mis ansias.
La palabra que tanto deseaba sentir.
Después de tus ojos me queda la nada.
Después de tus labios, me queda seguir.

Y para cuando todo termine, no estarás aquí.


María Sofía Borsini - (hoy)

Sin titulo 7.

La primera vez lo busqué por un cigarro, después, no se, por alcohol, por tragos o sustancias varias.
A continuación me sentía tan sola que lo invite (o quizás lo obligué) a acompañarme, y no muchos minutos después pude sentir su amor entre mis piernas, y desear tenerlo cada vez más lejos mío.
Descubrí que su forma de besar dolía, (y dolía de verdad, físicamente, nada espiritual o por el estilo) sentí como mordía brutamente al besar. Y odie sus labios. Luego me percate que su peinado era muy parecido al de una persona que no me caía para nada bien, y por ultimo, su manera de hablar comenzó a molestarme.

Hasta podría decir, (en un 50-50) que me agrado cuando mi mamá llegó más temprano que de costumbre y me descubrió (o nos descubrió) en aquella vergonzosa situación.

Y él no fue el único, pero es el que más recuerdo, como él hay varios otros, más y menos recientes, más malos o peores, en fin de cuentas, nadie ocuparía su lugar, ni aunque sea por una sola noche.

Y tenía no planeado hacer lo mismo está noche y verte ahí me decidió más aún a no decidir nada.
JAMÁS, me oís? JAMÁS te había cruzado ahí, (las veces que te pedí que fueras, las veces! La veces que cruce los dedos para ver si te veía, las veces! Pero no, nunca fuiste, y hoy si, y hoy que no te esperaba, si.)

Entonces me diste más bronca, más despecho y aceche otra victima para luego considerarme yo misma como la victima en cuestión. Y yo besaba y reía y vos no mirabas, y noté, algo que estuvo claro desde mucho antes pero yo me negaba a ver, note, realmente note, que no te importaba en absoluto.

Y tu estupido intento en que sea feliz y que consiga a “alguien” me enferma.

Si es posible, no vuelvas para acá, porque si no vas a volver verdaderamente, no quiero recordarte, porque me di cuenta, que la mejor manera de ser feliz, es estar lejos de tuyo.

María Sofía Borsini – Martes, 05 de febrero de 2008.

miércoles, enero 30, 2008

No se.

No tengo mucho para darte.
Quizás alguna que otra esperanza conservada en formol.
Ahogada por el paso del tiempo.
Algunas venas que aún no hayan sido cortadas, algún alcohol que no quemo las heridas, no se.
No tengo mucho para darte, solo un amor infinito y tres años de no saberlo.
Algún que otro sueño que espera ser rescatado,
Que espera sentirse útil, al menos una vez.
Algún que otro suspiro que se calla en el nombre de mi compañero de escuela.
Alguna que otra lectura que me hace acordar a vos, y a tus palabras.
Y a tu otro yo escritor.
Y a ese lápiz, y a ese papel que me hace amarte.

Estas perdido? Déjame encontrarte!
Dime adonde quieres ir, adonde debo llevarte.
Jamás pensé que te hablaría en este modo,
Pero sí, quiero seguirte, ahora que se esta acabando todo, y que el tiempo se nos escurre de la manos.
Lo que parece el final es un buen momento para comenzar de cero.
Pero con la ventaja de ya saberlo todo.

Y…si lo pienso dos veces digo: ¿por qué no?

No tengo mucho para darte, ahora que lo pienso…no tengo nada.
Ya lo he entregado todo.
Pero no estoy triste, no.
Estoy tranquila.
Perdí cualquier cosa que podría quedarme, lo perdí todo.
Ahora solo me queda ganar.

Queres ser mi compañero de juego?

María Sofía Borsini – Miércoles, 30 de enero de 2008.

#11

Como se llama la felicidad?
Iván Andrés.

María Sofía Borsini

Iván Andrés

Prometo desde este momento,
Desterrarme de recuerdos,
Deshacerme de memorias,
Olvidarme de esas letras,
No pronunciar jamas su nombre,
Adueñarte a ti de mi fidelidad,
Decirte cuanto te amo,
En cada uno de nuestros dias,
En cada uno de los dias,
Porque todos los dias seran nuestros.

- - - - -

-Yo se que es muy peligroso lo que te voy a decir, pero creo que te amo.
-Creo que yo también.
-Ay Dios, esto está muy mal, es más grave de lo que creí.

- - - - -

Creo que si Iván estuviera al pie del universo, yo iría a buscarlo,
Porque Iván es la única persona a la que quiero salvar, y Iván me deja que lo salve.
Debe ser por eso que lo amo.

María Sofía Borsini.

sábado, enero 26, 2008

La eternidad.

Todo el mundo que necesitas está aquí, entre tu espalda y el último milímetro de tu dedo anular, entre el ángulo exacto que me queda para acomodarme dentro de tus brazos, mover un poquito la cabeza y besarte igual.

Y si es posible, no dejar de besarte nunca, nunca, nunca, nunca jamás.

Y si cae la noche y estas acá, no me importan la noche, el frío, el viento, la lluvia, la oscuridad ni el sol, si lo estuviera.

Me importas vos, tus labios perfectos, tus manos más perfectas aún, tu tacto puntual, tus ojos fastuosos, lo escondido tras ellos, tu mundo interior, atrapante, apasionante, inacabable, lejano y cercano a la vez, de nuevo tus labios, y tu hermosa (hermosa, hermosa, hermosa) manera de decir te amo.

Y ahora si, mucho menos me importara la tormenta, los truenos, relámpagos y el fin del mundo que hay afuera si estas junto a mí.

Y lo estas, y lo estarás siempre. Entonces, listo, no me importa nada, absolutamente nada más, quedamos vos y yo, y la eternidad.

María Sofía Borsini – Sábado, 26 de enero de 2008.

#10

Y si llueve...
Que me importa.
Y si llueve...
Nos mojamos.
Y si llueve...
Te amo igual.

Y si es el fin del mundo,
No hay problema,
Te amo, te quiero,
No interesa lo demás.

María Sofía Borsini

domingo, enero 20, 2008

#9

Nadie es igual a nadie
Todos somos diferentes
Todos somos unicos
Todos somos igualmente unicos
Ser unico es ser uno más.

María Sofía Borsini.

sábado, enero 19, 2008

#8

Visualizame como si estuviera dentro de una jaula,
Aguaradando el momento...
Para poder salir.


[Pronto]
...muy.
María Sofía Borsini.

jueves, enero 17, 2008

Demencia en tres actos.

Delirio 1.

Hace 25 tonos de espera que no respondes
Hace 3 contestadores automáticos que me evitas
Hace 24 cervezas que intento olvidarte
Hace 1500 besos ajenos que creo conseguirlo
Hace 125 suspiros que me callo tu nombre
Hace 2 inviernos que necesito que me abraces
Hace 3 veranos que febrero se llena de lagrimas
Hace 6 nuevos amigos que no necesito ayuda
Hace 3 malditos amores que no te has ido
Hace 4 nuevos nombres y 2 repetidos que no me importas
Hace 3 abriles fríos que te has vuelto inoportuno
Hace 4 cumpleaños que no recibo noticias tuyas
Hace 2 lunes, 3 domingos y 5 miércoles que no estas
Hace 3 cigarrillos que equivoco el camino
Hace 75 kilómetros que me escapo de mí
Hace 2 cuadernillos que no lees mis poesías
Hace falta que te explique?
Hace de cuenta que no existo
Hace 7 días que deje de buscarte
Hace 1 sola noche que lucho por otra causa

Delirio 2.

Que puedo hacer cuando no puedo hacer nada?
Solo me restan las mentiras, las palabras
Que puedo hacer cuando no puedo hacer nada?
Y todas esas horas en las que te recordaba
Que puedo hacer cuando no puedo hacer nada?
Los viajes y los kilómetros que nos separaban
Que puedo hacer cuando no puedo hacer nada?
Aquel hermoso azul que destellaba tu mirada
Que puedo hacer si ya no puedo hacer mas nada?
Si es verdad que no me amas,
Solo me queda morir de amor de por ti
Y nada.

Delirio 3.

La piel se hace cada vez mas dura
Y parece que las lágrimas se acostumbran al dolor
No te voy a decir que estuve llorando
Y mucho menos que lloraba por vos
Voy a simular que todo es como antes
Que tu amistad no me molesta ni me sume en el alcohol
Vamos a charlar como apenas me encontraste
Y voy a hacer notar cada absurda confesión
Y cada vez que vivo me torturo en el instante
Y siempre que respiro el aire tiene olor a vos
Cada ojo que me cruza se ve tan frío y tan distante
Pero vos no tenes la culpa y tampoco la tuve yo
Y no voy a hablarte hoy aunque vos crees que hable
Y no soy igual que antes aunque no lo notes vos
Cambie en el instante preciso en que marchaste
Y cuando te diste cuenta que este cuento no era amor
No preguntes que es lo que quiero porque no conozco la respuesta
No contestes mis preguntas con total normalidad
Cada día que te encuentro no te encuentro al saludarte
Ahora somos dos extraños vestidos de mediocridad
Olvídate lo que sabes porque ya no me conoces
No tiene algún sentido fingir que no me lastimas
No lo digo porque no vale la pena que lo sepas
En el fondo estoy segura que morir no esta tan mal
Para que voy a mentirte, me doles, pero puedo hacer que no se note
O mucho peor que eso, no puedo hacer que lo notes vos.
María Sofía Borsini

CRONICA DE COMO PERDERTE - "Las Últimas Luces Del Alba" -

A Agustín Perletti.

Las últimas luces del alba.

No creo q vayas a leer esto
A decir verdad, nunca me leíste
Lo se, no actúes
Hace casi 84 lunas que estoy escribiéndote
Dedicándote palabras
Creándote luces
Malgastando sentimientos
Para no encontrar respuesta
Para no oír jamás un "yo también"
Y soporto hasta donde puedo soportar
Y cedo más de lo que querría ceder
Y seguís ahí, en otra dimensión
Y seguís ahí, con tu pared
Con tu cigarrillo y tu botella de alcohol
Con tu empatía y tu superación
Con tu nada, con tu egoísmo y tu "yo"
Con tus karmas, tus silencios, tus olvidos y mi reloj
Con todo lo que sos y no me acostumbro a aceptar
Con todo lo que no sos y lo que querría que fueras
Y si lees esto, mejor
Y si lees esto, peor
Me da lo mismo
Mentira, no
Si lo lees no sabré donde ocultarme
Y si no lo lees no sabré como seguir soportando
Y si se queman las estrellas
Y anoche fue la última alba
Lamento tanto que haya sido así
Y si no vuelan más los pájaros
Y si no amanece en la ruta rumbo a ningún lugar
Volviendo a ningún lugar
A mi lugar, a mi no lugar
Fue un placer haberte conocido
Fue un encanto que seas parte de mi vida
Fue una lastima que no me quisieras como yo lo hice
Como yo lo hago
Como vos simulas
Como yo no puedo saber si es cierto.
Como me engaño pensando que si,
Que alguien en algún lugar
En ese lugar, en tu lugar
Siente por mí, lo que siento por vos
Y no es fácil
No, no es fácil
Y el cigarrillo se consume
Así como mi paciencia y mis energías en comprenderte
Y prendes otro más
Y tomas un trago más
Luego de decir que no volverías a hacerlo
Y me miras
Y no decís nada
Solo me miras
Y esos ojos son todo el lenguaje que recibo
Y entiendo que es lo que hay en ellos
No se si me miras con furia, con temor
Con bronca, con dolor
Con amargura, con un rayo de sol
No se.
Pero me miras
Y se que ahí seguís, y se que ahí estas
Solo, en tu oscura inmensidad
Y pasa la música, la gente, los coches, los cables
Los pianos, las voces, las manos, los tragos, las caras
Los besos, vos, yo, los demás y vos de nuevo...
Y te vas sin avisarme
Y volveremos a empezar el próximo fin de semana.


María Sofía Borsini 11/08/07


Por la mañana.

No se que hacer
No se que decirte
Y vos jugas
Y vos no me viste
No se si seguir con esto
No se si esto nos sirve
Y vos no estas
Pero igual no quiero irme
No se si la culpa es mía
No se si tendré que arrepentirme
Y vos te vas
Y creo que nunca te fuiste
Y no se que sentís
No, no se, me olvido
Y no me hablas
Y yo me muero por decirte
Que quiero tus palabras
Y las quiero ya.

Y las quiero siempre

Y te perdes en pasillos blancos
Y no regresas nunca
O regresas como si nada

Y dormís un sueño interminable
Y solo quiero que despiertes
Y solo quiero que me encuentres

Y no se adonde te fuiste
Y no se adonde estas
Y solo quiero que regreses
Que tan solo estés acá.

María Sofía Borsini 22/07/07

Utopía.

Se acabo la curiosidad
Ya sos normal
Ya no me enredo en vocablos extraños para interesarte
Ya se que sos mío y me da igual si te impresiono o no

Cuentas horas puede durar un segundo?
A cuanta eternidad equivale a este minuto?
Me desespero de esperarte y creo que jamás voy a llegar
A ese lugar, a vos
Y justo ahora, que estas tan cerca...
Pareces tan lejano.
Frío, gente y voces
Y a pesar de todo, soledad
Mucha soledad
Soledad lejos tuyo
O cerca tuyo
Da igual

Voy a ver si esta semana me hago un tiempo
Para revivir la utopía de volver a ser especiales

María Sofía Borsini 25/06/07

Sin miedos.

Hoy tengo que hablarte
Y no me importa con cual de tus "yo" me encuentre
Hoy no les tengo miedo

Hoy tengo que hablarte
Y no me importa si eres tú, el que me ama
O tú, al que no le importo
O tú, el que no respondo
O tú, el que apenas me conoce.

Hoy voy a escapar de mi misma
Y no habrá Borges ni Cortazar que pueda ayudarte
Luego volveré a ser lo que no fui nunca
Luego seré otro día lo que no soy.
Luego volveré a tus ojos.
Luego empezaremos de nuevo
En este circulo sin salida y sin timón.

Hoy tengo que hablarte
Y no me importa absolutamente nada
Pero hoy fuiste más rápido
Y dijiste lo que no esperaba escuchar
Lo que temía demasiado
Lo que sabía que iba a llegar
Pero igual me queda dura, me quede helada.
Creyendo que quizás no podía ser verdad

Y todas mis palabras se empezaron a olvidar
Todo lo que iba a decirte era lo que ya no me iba a importar
Y el círculo rutinario por fin llego al final
Y ahora que lo tengo, no se si es lo que quería...
Y ahora que lo pienso, me gustaba tanto soñar...

Maria Sofia Borsini 15/08/07

Catarsis.

Más verdad de la que esperaba
Más verdad de la que quería escuchar
No estaba tan preparada
No era tan fuerte como me creía
No era tan fácil decirte adiós
No, no era tan fácil.

Ya se que no lo haces apropósito
Pero duele.
Duele porque soy humana y las cuchillas cortan
Duele porque te quería, de verdad te quería.
Duele porque eras presente y futuro.
Duele porque creía que esta vez toda estaba bien.
Duele porque habías llegado hasta aquí.
Duele porque eras perfecto.

Y doles porque creía que esta vez era cierto
Y doles por que fue cierto en realidad.
Y lloro porque no encuentro otra salida
Y lloro en mi catarsis más normal.
Y me pareces casi cercano, casi imposible
Y me enloquezco porque se que no estarás.
Y extraño el sabor de aquellos besos
Que aquella noche pude jurar que eras real

Y vos que nunca me quisiste y yo que te quería de verdad
Y se me hace tan difícil saber que no estas mas acá
Y me resulta increíble y no te puedo ni mirar
No te voy a olvidar

Maria Sofia Borsini 15/08/07

Ahora que no estas.

Ahora que no estas
El confín de la tierra
Ahora que no estas
Será la muerte eterna
Ahora que no estas
Tus ojos son de guerra
Ahora que no estas
Aquel alba se hace negra

Ahora que no estas
No habrá sol ni primavera
Ahora que no estas
Es tu luz la que se inverna
Ahora que no estas
No respiran las estrellas
Ahora que no estas
Más me hundo en mi caverna

Ahora que no estas
No habrá voz que me detenga
Ahora que no estas
Nicotina gris y Yerma
Ahora que no estas
El alcohol será... será...

Ahora que no estas
No me importa más si piensas
Ahora que no estas
Podes hacer lo que mas quieras
Ahora que no estas
No seré yo quien te comprenda
Ahora que no estas
No habrá más mentiras necias

Ahora que no estas
Te extrañare en las decenas
Ahora que no estas
No escuchare más la certeza
Ahora que no estas
Melancolía y lluvia seca
Ahora que no estas
Aceptare que no regresas

Maria Sofia Borsini 16/08/07

El fin.

No quedara en mi vida una luz
No quedara en mi vida, la vida.
No quedara una palabra en la hoja
No quedara una palabra en mi boca
No quedaran palabras.
Callare eternamente
Callare por siempre con tu silencio.
No quedaran motivos
Ni mensajes, ni angustia alguna.
Me escapare de mi y conmigo se iran las risas,
Las estrellas y los soles.
Y la felicidad que me diste
Y la que podría haberte dado.
Y no quedara luz alguna.
No habrá mas agua, ni aire, ni vida.
Se mueren aquí todas las esperanzas,
Se suicidan aquí todas las primaveras,
Las ilusiones o la luz del día.
No quedara paz en tus ojos.
No existirá otra paz en mi vida.
Moriré con mi corazón que late,
Moriré auque mi cuerpo respire.
Y no existirá nada, absolutamente nada
Que me saque esta agonía.

No sos vos, es la muerte.
El temor de morirme sola.
El temor de morirme lejos tuyo.

Maria Sofia Borsini 16/08/07

miércoles, enero 16, 2008

La nada misma.

Busco en el cajón dos veces, pero nada encontró porque en realidad no sabia que estaba buscando. Revisó en el armario otras tres y volvió a la cocina. Tomo un vaso de agua natural y salio a revisar el garaje.
Se chocó con un par de infancias, vio cajas llenas de diferentes "nadas" y decidió parar de buscar. Cortó un par de flores del cantero y se fue al cementerio para sentirse más grande. En la entrada se sintió perdido, después encontró el lugar.
Ya ni se sabia hombre o mujer, desorientarse era el camino que mejor conocía él (o la sujeto) en cuestión. Caminó seis pasos, dejó dos flores, dio cuatro más y terminó el ramo. La cripta poseía su nombre, el que jamás podremos develar.

Final próximo.


Texto escrito en conjunto por María Sofía Borsini y Lucas Martinetti.

lunes, enero 14, 2008

Sin titulo 6.

Vos preferís taparte los oídos, vendarte los ojos…
Y yo te pido que mires, que escuches, que te des cuenta.

Vos no queres revolver el pasado, solo queres que se quede ahí, donde debería estar.
Y yo te digo, que el pasado es justamente el lugar donde yo no lo puedo dejar.

Y vos no queres hablar de ciertas cosas, y yo me esfuerzo por despertar tu curiosidad y que preguntes, y que conozcas, y que por fin entiendas, o no soportes más.

Y espero que la verdad no te golpee, de la más cruenta forma, y espero no ser yo la culpable, de tu decadencia hacia mí.

Y espero que después de caer te levantes, y que la realidad no sea para ti el castigo, que el presente condeno para mí.

Suéltame! No ves que no quiero arrastraste?
Al rincón de mi alma donde lloro cuando los demás ojos no me ven.
No me mires, no me mires tanto, no soy nada de todo eso que vos crees.

Perdoname, perdoname a punto, no mereces lo que esta pasando, no mereces lo que estoy haciendo, no mereces mi yo, ni mi martirio, te mereces algo mejor, te mereces mucho más.

Te mereces alguien más normal.

Por qué tuviste que fijar tus ojos aquí? En el caos más completo de la primera destrucción?
Por qué tuviste que creer que tenía una salida? Cuando a esta altura, ni yo misma lo se.

María Sofía Borsini – Martes, 14 de enero de 2008.

domingo, enero 13, 2008

Nada.

-En que estas pensando?
-Eh? En nada.

Estaba pensando en un nombre que no puedo decirte, pero que vos conoces.
Entonces te digo “en nada” cuando vos sabes que siempre pienso en algo, y que si digo “nada” es porque ese “algo” era muy importante y bastante incomodador.

Perdón, pero no me sale amarte.

María Sofía Borsini – Domingo, 13 de enero de 2008.

Espectro.

No soy más que un espectro de mi misma.
La luz que yo tenía, se apago con él.
Ahora solo me queda un espejismo.
Una mala imitación mía, de lo que algún día fui.
Es por eso, no te engañes, no te mientas a ti mismo.
No corras con tal peligro, adviértete.
Mirame a contraluz y date cuenta,
Que nada queda del yo que yo misma solía ser.

María Sofía Borsini – Domingo, 13 de enero de 2008.

martes, enero 08, 2008

PSIQUE -hablando a una pared-[capitulo ocho]

8. Perverso ego.

Pensé, pensé, pensé tanto
Pensé como nunca había pensado en mi vida

Aun no tengo en claro en que estaba pensando pero.
Ni tampoco porque perdía tiempo en pensar.

Realmente estaba asustado?
Realmente le tenia miedo?
No, no puede ser posible.
Aunque no existen imposibles tampoco.

Mi clara estupidez se me notaba en la cara.
Y no podía permitirlo.
Nunca antes me había sentido tan idiota.
Debe ser porque fui un idiota toda mi vida,
Y recién ahora me venía a dar cuenta.

No se para que tuve que gritarle,
Se veía tan débil, tan frágil.
Se quebraba con la nada, se quebraba con el viento.
Y yo, maldito abusivo de mi fortaleza!

Quería pedirle perdón, pero no me animaba.
Quería pedirle perdón pero no podía.
Perverso ego el de mi hombría, que me estaba quitando la oportunidad de hablarle.
No porque realmente fuera culpable, solo porque quería decirle algo.
Algo, lo que sea.
Y ese algo podía ser un perdón.

Pero en el fondo me sentía culpable.
Me sentía culpable y lo sabía.

Aunque sea por disculpas pero igual voy a hablarle.
Cada vez me vuelvo más idiota si no escucho su voz,
Si no veo su risa. O si al menos no la tengo cerca.

María Sofia Borsini

lunes, enero 07, 2008

#7

Yo no creo que ahora sea tarde.
Más tarde si.

María Sofía Borsini

sábado, enero 05, 2008

PSIQUE -hablando a una pared-[capitulo siete]

7. Primer error.

Estoy loco pero aún tengo algo de ese sentido común que tiene la moral de la gente.
Y mi boca se había apoyado en sus labios.
Y ahora no me animaba a mirarla.
Pero aún así, podía ver sus ojos.
La mirada de sus ojos aunque estuvieran cerrados,
Aunque estuvieran ansiosos,
Aunque estuvieran tristes,
Aunque estuvieran neutros,
O aunque se achicaran con el sol.
Y los frunciera hasta hacerlos pequeñamente graciosos.
Pero bellos.
Bellos como toda ella.

Y cuando la presentía pasar, esquivaba sus pasos.
Cuando sentía su armonía, escapaba del pasillo.
Y la dejaba deslizarse, pacíficamente celestial.

Hasta que un día entrecruzo mis sentidos acechándola desde un rincón.
Y vino a mi encuentro. (Cosa que ninguna mujer, loca o no, había hecho en la vida por mí)

-Me tenes miedo.
No, no, para nada.
-Si, me tenes miedo y estas incomodo.
Ehh… no, te lo juro.
-Por quien me lo vas jurar, alma perdida? No jures, no me gustan los juramentos.
(Silencio)
-No queres verme.
No, no, no es eso, sí quiero verte.
-Pero…?
Pero no se, pero nada. Por qué me preguntas por los peros?
-Porque siempre hay un “pero”.
Esta vez no lo hay.
-Sí que lo hay.
QUE NO LO HAY MALDITA SEA!



Se quedo callada. Creo que no debí gritarle.

-Me voy.
Adonde?
-Por ahí, tengo muchas cosas que hacer.

Era mentira, ambos sabíamos que esa fue una mala excusa.
No podía tener nada para hacer, ni ella ni yo.

No al menos en esta jaula de almohadones.

María Sofía Borsini